sábado, 16 de octubre de 2010

Cuando tengas hijos, me vas a entender.

Ilustración por @SkinniyDupree


No existen seres perfectos y siempre he pensado que si los hubiera todo sería muy aburrido, es por eso que aprendemos a amar a las personas con sus defectos y no a pesar de ellos, y más que defectos me inclino por llamarlos características que nos parecen difíciles de aceptar.

Por tanto, es evidente que ni mi Mamá ni yo somos respectivamente una madre perfecta ni una hija perfecta y que mi hija tampoco lo es.

El día de hoy, hace algunas horas mi hija jugaba con un bote de monedas viejas que a decir verdad no sé ni como ni por qué se fueron acumulando en un gran bote de helado, el caso es que empezó a lanzar monedas en plena sala de televisión sin un objetivo aparente y yo por supuesto le llamé la atención, enseguida su abuela (mi Mamá) atravesó la sala y me dijo: "déjala, no pasa nada, siempre y cuando recoja cuando termine de jugar" entonces recordé una frase que escuché hace poco en una película "sabes por qué los abuelos y los nietos se llevan también? porque tienen un enemigo común".

Para entonces las dos nos encontrábamos "enfurruñadas", yo me sentí mal por regañarla en cuanto empezó a jugar sin siquiera preguntarle a qué estaba jugando, tratar de entender que era lo que quería hacer y luego explicarle por qué la sala de televisión no era un lugar apropiado para lanzar monedas y ella, imagino, se sentía incomprendida por mi, así que decidió dejarme de hablar.

Mi hija es una niña seria, callada y ante un situación como esta, su recurso es siempre encerrarse más en sí misma, yo trataba de aligerar la situación, seguí intentando obtener una respuesta, intenté abrazarla, nada funcionaba, me trataba como si yo no existiera y fui perdiendo la paciencia hasta que le dije que cuando quisiera hablar conmigo me buscara en el cuarto y que no olvidara recoger las monedas al terminar, de nuevo no hubo respuesta, me fui a mi cuarto como si fuera yo la niña y me recosté un momento, al cabo de unos minutos mi hija entró, dijo que quería mostrarme algo y me llevó de la mano y en silencio hasta la sala, con las monedas en el piso había escrito dos palabras: "lo siento". Por supuesto la abracé, soltamos una lagrimita cada una y nos pusimos a ver juntas una película, luego mi hija formó con las monedas más palabras y algunos dibujos y cuando terminó, cumplió su promesa y guardó las monedas.

Esta situación me hizo pensar en como nos comunicamos padres e hijos, yo he pasado la vida tratando de ganar la aprobación de mi Madre y sin embargo recuerdo muy pocas ocasiones en las que le haya dicho "lo siento", mi relación con ella siempre ha sido tirante, complicada, no, no estoy ni cerca de ser la mejor de las hijas y en cuanto a ella, sé que ha hecho todo de la mejor manera, aunque sea desde su perspectiva, sé desde el fondo del alma que todo lo que hace, lo hace porque considera que es lo mejor para mi, para mi hija o para quien sea, hablando de nuestra familia.

Y es entonces que comprendo que estoy en esta carrera constante por mostrarle que se equivoca cuando no cree en mi, por que haga suyos mis logros grandes o pequeños, por que, en una palabra, esté orgullosa de mi.

Hoy, en ese momento en el que la comunicación con mi hija se bloqueó por un momento, aún cuando después todo volvió a la normalidad, me pregunté si un sentimiento similar al mío está creciendo en ella, si en todo momento siente que el menor error puede hacer que yo me sienta decepcionada de ella, si todo, o gran parte de lo que hace, tiene el propósito de complacerme, de darme gusto, de lograr mi aprobación.

Acaso se dará cuenta? seré capaz de demostrarle, de convencerla con mis actos de que su sola existencia me llena de orgullo? Será que mi Mamá se ha preguntado lo mismo que yo?...

Puede romperse este ciclo en el que al fin amando a un hijo de forma incondicional, como se debe, como es natural, entiendas por fin como es que te han amado tus padres?

Ah! esa sentencia eterna que escucho desde que tengo uso de razón: "Cuando tengas hijos, me vas a entender"... conque a esto se refería... como siempre, a fin de cuentas tenía razón, sin embargo, intentaré algo diferente con mi hija, que tal algo como:

"Cuando sea capaz de demostrártelo, me vas a entender."

8 comentarios:

  1. Aiii doña!!! Usted siempre me hace sentir cucaracha con sus entradas ¬¬
    Aunque no me gusta que me juzguen, ni hacerlo con la gente, constantemente me la paso juzgando a mis padres y algunas veces, aún intentando ponerme en su lugar no lo logro.
    Bien dicen que no hay un manual que nos diga cómo ser buenos padres, pero oiga, sería mucho pedir que al menos no borre nunca su blog para que cuando me toque a mí, pueda volver a leerlo las veces que sean necesarias??? =D
    Gracias de nuevo por poner mi dibujillo en esta entrada, con eso y con la anécdota de la pulga me sacó una lagrimilla =P
    La quiero, doña!!
    Saludoxxx

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  2. Doña:

    Escribe usted tan naturalito que me acabo sus entregas antes de empezarlas.
    Le cuento que mi hija Ana Paula no escribe con monedas viejas, dibuja con monedas de poco valor (50 ctvs y 1 peso)
    Algo debian de tener en comun esas hijas de Templarias tan raras como usted y la Doña Flor.
    Reciba saludos afectuosos desde el desierto Norte.

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  3. Yo me dedico a criticar padres, a encontrar sus errores... Pero me parece que estás haciendo un trabajo bastante decente. :D
    Yo sólo cambiaría tu frase del final. Yo cambiaría la certeza de que sabes cuándo o cómo te va a entender, por la duda razonable y humana, la pregunta a tu hija: ¿me entiendes? ¿entiendes por qué lo hago? Y, sobre todo, simplemente: ¿Sabes que te amo? ;)
    Como siempre, leerte es una aventura intelectual y emocional. :D

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  4. Felicitaciones, Tania. Hace un rato twitié que la auténtica filosofía de hoy la hacen geeks y web masters como tú, y ya nunca más las cucarachitas de filosofía y letras. Una vez más me das buenos motivos para vivir y entender mejor el sentido que debemos dar a la existencia. Saludos a la Pulga y tu mami.

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  5. La Pulga es una buena hija. No sé como la tratas asi.No es cierto. Sólo fue no empezar esto con algo como lo que todos dicen.

    Tengo la dicha de ser padre de dos hijos. Sé que mis padres tenian razón cuando me decian esa frase. Y sí los he llegado a entender.

    Amar a los hijos es una gran prueba porque en todo momento están enseñandonos cosas mientras nosostros estamos intemtando "educarlos como se debe".

    Buena enseñanza tengas de esto.

    Saludos,

    Eloy López.

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  6. educar es de todos los días, reflexionar y volver a aprender de la vida misma, mi hijo (unico) de 18 años está en la edad de la rebeldía, batallo con sus no, sus regaños hacia mí, sus respuestas irreflexivas, y claro no podemos dejar de quererlos.
    Lo que no puedo permitir es la falta de respeto a su madre , que es la que le dió vida y lo engendro nueve meses;
    hacerlos entender que primero es su madre antes que nadie , ni la novia misma.

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  7. Pues sí mi querida comadre, a veces creemos que los niños dentros de su inteligente pequeñez, son irracionales, qué cosa más absurda, a lo niños de ahora no les cabe eso de "son niños, no se enteran de nada", pues lamento decir que no es cierto, y aún las abuelas se equivocan en eso. La sagacidad y la inteligencia se nos va quitando conforme nos vamos a la escuela y es un ADULTO lleno de complejos y frustraciones quien nos enseña elñ mundo... SU MUNDO, ojalà todo los vièramos con los ojos de los niños... TE FELICITO COMADRE... Y TE AMENAZO CON ALGUN DÌA DARTE UN ABRAZO HASTA AGUAS... y tomarnos un cafè seguro...

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  8. Tania querida!!!!
    Tania Admirada!!!!

    Como madre de dos peques, pareciera que viste lo que me pasa en la cotidianidad, y hoy me viene a la mente algo que le dije a mi hija de 9 añotes, en un dia que le llamaba la atención por algo que no recuerdo ahora, una indisciplina seguramente, y la tome de los hombros, ella me miraba enojadisima y le dije de frente, mi amor, el corregirte o el llamarte la atención es por que te amo, por que deseo que seas mucho mejor que yo como ser humano, y que por ese amor que te tengo, no dejare que hagas lo que se pegue la gana, porque la vida no es asi, y este amor que siento por ti hija, me impulsa a tratar de que busques tus caminos.
    Mariana me abrazo y lloro y me dice si mami, te quiero. Y si Tania, hoy entiendo y comprendo tantas cosas que me decia mi ama! hoy la entiendo mucho mas.....
    Amiga un abrazo y un beso.

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